En nuestra misión de llevarlos a conocer nuevos destinos y aventuras encontramos un hermoso lugar llamado el Charco La Planta en el municipio de Arecibo. Este es perfecto para pasar el día en familia o para simplemente llegar en un día de road trip a darse un chapuzón con las amistades es sus refrescantes aguas.
Este interesante lugar es conocido como el río La Planta en dicho municipio. Lo que peculiar a este histórico rincón es que alrededor del año 1923 se construyeron sus famosas cascadas para crear energía hidroeléctrica para ser utilizada por los residentes de la región. Una vez llega el petróleo como fuente de energía eléctrica la planta hidroeléctrica deja de ser utilizada por el gobierno.
Luego de un tiempo los residentes del área comenzaron a frecuentar el Charco La Planta para disfrutar de sus dos hermosas cascadas creadas por el hombre que hoy día se han vuelto una de las más visitadas del área por turistas y locales.
El camino es uno sencillo y accesible para todo tipo de vehículo. Un detalle peculiar del mismo es que desde la entrada de la avenida hasta la entrada al área del río hay una pared de tierra adornada por una línea de tapitas de botellas y envases recicladas que le dan camino su propia personalidad. Muchos nos preguntamos, ¿Quién tuvo el tiempo y sobre todo la creatividad para hacerlo? Bueno, según un residente local que se encarga de vigilar el lugar donde se estacionan los carros de los visitantes quién tuvo la creatividad y el tiempo para pegar todas esas tapitas fue Don Moncho. Este señor es el dueño de la casa que queda justo en la entrada de La Planta quien algún día le surgió la gran idea y se entretuvo semanas colocando tapita por tapita con un poco de cemento para que estas no se despegaran con el tiempo.
Ya una vez llegamos al paraíso del Charco La Planta, diferentes familias ya estaban instaladas con sus “BBQ’s”, música y todo listo para pasar un excelente día.
La primera cascada se puede ver desde que ya entras y es bastante accesible, pero ya para la segunda es una travesía aparte pues existen dos caminos para llegar. En el primero debes subir una cuesta algo empinada y en el segundo debes atravesar una pequeña parte del río de unos cuatro pies y continuar caminando hasta que se encuentre con la majestuosa cascada a la cual vale la pena llegar. Y si te llenas de valor sé que vas a disfrutar lanzarte de una de las piedras que adornan esta cascada. Cabe recalcar que el agua es un tanto fría, pero luego del recorrido nada mejor que el agua refrescante para recuperar energías.
Definitivamente es un paraíso que hay que conocer en persona. Nosotros disfrutamos sin duda alguna de esta aventura y queremos que usted también viva esta agradable experiencia.
¡Mantener nuestros recursos naturales limpios es responsabilidad de todos!
Mapa de Ubicación:
Síguenos en nuestras redes como Facebook, Instagram, Twitter y suscríbete a nuestro Canal de Youtube. Si tienes preguntas no las puedes dejar en la sección de comentarios de esta página.
